Cada tipo de tejido del organismo deja pasar cantidades distintas de esta radiación, por lo que la placa radiográfica se impresiona con mayor o menor intensidad en cada zona, dependiendo del tejido u organo que tiene adelante, lo mas denso o sólido es mas blanco, pues dejo pasar menor cantidad de radiación y los tejidos menos densos o con aire, se observan mas obscuros, ya que la cantidad de radiación que pasó fue mayor.
La imagen obtenida de los órganos y tejidos, aporta información muy importante al médico radiologo para relacionarlo con la imagen que debe de tener una radiografía normal, y asi se pueden identificar imágenes que ayuden al diagnóstico (quistes, tumores, aumentos o disminución de tamaño de los órganos, fracturas de huesos).
Una radiografía es la imagen que se obtiene utilizando una mínima cantidad de Rayos X, de alguna zona del cuerpo y de los órganos internos.
Para realizar la radiografía al paciente se le coloca entre la fuente que emite la radiación y la placa radiográfica.
En el caso de las radiografías de tórax, se pide que realicen una inspiración forzada y la mantengan hasta que les avisen, para hinchar todo lo posible los pulmones y obtener una imagen más nítida.
Las posiciones habituales son de frente, de perfil, oblicuas... de la zona anatómica a estudiar.
El técnico en radiología le indicará al paciente en cada momento lo que debe de hacer para obtener la imagen de mayor calidad posible. Una vez realizada, y antes de que el paciente se vista, el técnico en radiología revela la placa y la revisa para comprobar que la imagen está tecnicamente correcta, con calidad diagnóstica y que no es necesario repetirla.
¿Qué riesgos tiene la realización de una radiografía?
En la realización de una radiografía, se expone al cuerpo humano a una cantidad mínima de radiación.
Esta técnica está sometida a rigurosos controles, tanto de los equipos médicos, como de las técnicas de realización, que buscan reducir el tiempo de exposición y la cantidad de radiación.
Una radiografía solo se debe realizar cuando es necesario y evitar su repetición no justificada.
No se deben practicar radiografias a una mujer embarazada, (principalmente en el primer trimestre), a menos que sea estrictamente necesaria, cuidando de utilizar las mayores protecciones a la paciente y embrión/feto.
¿Para qué se realizan las RX?
A partir del informe del radiólogo, y teniendo en cuenta los síntomas y signos que presenta el paciente, el médico puede realizar el diagnóstico de la enfermedad o problema de salud. En algunos casos, la radiografía es el primer paso antes de indicar otras pruebas diagnósticas de mayor coste, riesgo o dificultad de realización, ya que permite o bien realizar el diagnóstico, o descartar otras causas.
Las radiografías permiten descartar o diagnosticar fracturas óseas, tumores, quistes, o infecciones entre otras causas de enfermedad.
Indicaciones:
1) La mayoría de las radiografías óseas no requieren de una preparación especial, para estudios especiales o contrastados puede requerirse una preparación o dieta específica.
2) Se le puede solicitar que se quite toda o parte de su vestimenta y que utilice una bata durante el examen.
3) También se le puede solicitar que se quite joyas, lentes y cualquier objeto de metal o vestimenta que pueda interferir con las imágenes de rayos X.
4) Las mujeres siempre deben informar a su médico o al tecnólogo de rayos X si existe la posibilidad de embarazo.